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Hacia un nuevo modelo educativo
diciembre 23, 2022
Tuvimos el agrado de conversar con Gabriela Azar, Directora de la Escuela de Educación de la Universidad Católica Argentina y autora del libro La gestión de la enseñanza inclusiva, acerca de los modelos pedagógicos actuales y la incipiente transformación educativa.
El modelo de enseñanza basado en la memorización quedó hoy, para muchos, obsoleto. ¿Cuál es tu opinión al respecto?
El modelo de enseñanza basado en la memorización ha quedado hoy, para muchos, pasado de tiempo, obsoleto, pero no es que haya desaparecido. Básicamente la educación argentina se ha construido sobre la base de un modelo educativo enciclopédico que implicaba aprender mucho sobre todo sin tener clara conciencia del procedimiento de comprensión. Es este procedimiento el que posibilita que un niño, joven o adulto, al aprender, tenga la capacidad de interpretar adecuadamente, recordar lo que aprende a lo largo del tiempo y, fundamentalmente, poderlo transferir.
Cuando el modelo de enseñanza se basa puramente en la memorización, las cosas, con el tiempo, se olvidan. Si este proceso no está acompañado de la aprehensión, si uno no puede sostener firmemente los aprendizajes para luego seguir construyendo y transferir lo aprendido; si no hay interconexión entre aprendizajes, evidentemente no se aprende. Es por esto que hoy quedó obsoleto el modelo que se basa únicamente en memorizar.
También debemos tener en cuenta que en el transcurso de estas últimas dos décadas las tecnologías de la información y de la comunicación han impactado de tal manera en el aprendizaje que la idea de la memorización como único pilar ha sido desechada.
Ahora bien, esto no quiere decir que haya que descartarla: tener una buena memoria es imprescindible para recordar, evocar, transferir. El tema es complementarlo adecuadamente con otras estrategias que permitan priorizar el comprender, el analizar, el poder transferir y el lograr un aprendizaje significativo.
¿En qué deberíamos basarnos para construir un nuevo modelo educativo que tenga por fin lograr aprendizajes significativos y efectivos?
Esta es una pregunta sumamente interesante. Creo que en el transcurso de estos últimos 30 años se ha hecho un esfuerzo sostenido para lograrlo tanto en organismos internacionales como en los distintos ministerios de educación a nivel local. Específicamente en nuestro país, con la última reforma de la ley de Educación Nacional del año 2006, se buscó que la educación priorizara fundamentalmente el desarrollo integral de capacidades, aptitudes para nosotros. ¿Qué es una aptitud? Es una capacidad compleja que involucra e integra en el acto de enseñanza y aprendizaje conceptos, datos, hechos que informan al estudiante para que logre saber. Se refiere a la capacidad para saber hacer (implementar estrategias, métodos, técnicas) y saber ser (encarnar valores, respetar las normas, tener buen comportamiento).
Hoy deberíamos basar el modelo de enseñanza en una especie de selección adecuada de capacidades que nos permitan un aprendizaje con significatividad. Para lograr un aprendizaje profundo, efectivo -en términos de poder reproducirlo y ser capaz de resolver situaciones concretas con los distintos contenidos durante toda la vida-, necesitamos afianzar el refuerzo en las habilidades.
Este modelo implica saber que es más importante qué soy capaz de saber hacer con lo que sé que solo lo que se. Para construirlo, nosotros desde la Universidad Católica Argentina, desde el departamento Educación, trabajamos el modelo que acuñamos con la sigla AIE -Aprendizaje Inclusivo y Efectivo-, que busca fundamentalmente la formación de profesionales capaces de aplicar un sistema integral que priorice enseñar para que otra aprenda con efectividad e inclusión. Para lograrlo, se precisa un estilo de planificación estratégica que ponga en primer lugar las capacidades y una evaluación formativa que se base fundamentalmente en rúbricas -para autoevaluarse, coevaluarse (evaluar entre pares) y recibir, a la vez, una retroalimentación.
¿Qué le dirías a un docente dispuesto a innovar y transformar sus métodos de enseñanza?
Para un docente que está dispuesto a innovar y transformar sus métodos de enseñanza lo primero que le diría es que tiene que saber el contenido conceptual que enseña. Nadie puede enseñar si no sabe lo que debe transmitir. Esto es prioritario.
Creo que hoy, al utilizar distintos formatos y recursos para enseñar -sobre todos los tecnológicos- estamos necesariamente interpelados como docentes a conocer maneras de trabajar de una forma mucho más creativa. Una forma que nos permita ver con inmediatez cómo los estudiantes van teniendo capacidad para elaborar respuestas, resolver problemas, discernir, analizar, sintetizar, transferir, hipotetizar, jugar…En definitiva, una forma que nos haga conocer la operatoria lógica que cada uno tiene que aplicar de acuerdo a las distintas etapas evolutivas.
Por último, creo que para innovar es fundamental animarnos a transformar. Innovar es buscar nuevas estrategias para hacer las cosas de una manera diferente. Innovar es buscar la manera de que el estudiante se entusiasme, se motive, le guste lo que hace y pueda aplicar las distintas operaciones lógicas y metodológicas de pensamiento que se ponen en juego en el aprendizaje. Si nos animamos, nos encontraremos con una valiosa clave para la verdadera transformación educativa.